Dale a tu cuerpo alegría macarena
que tu cuerpo es pa' darle alegría y cosa buena,
dale a tu cuerpo alegría macarena.
eh, macarena. aay
Macarena tiene un novio que se llama,
que se llama de apellido vitorino.
y en la jura de bandera del muchacho
se la dió con dos amigos.
Macarena tiene un novio que se llama,
que se llama de apellido vitorino.
y en la jura de bandera del muchacho
se la vió con dos amigos.
Dale a tu cuerpo alegría macarena
que tu cuerpo es pa' darle alegría y cosa buena.
dale a tu cuerpo alegría macarena.
eh, macarena. aay
Macarena, macarena, macarena
que le gustan los veranos de marbella.
macarena, macarena, macarena
que le gusta la movida guerrillera.
Dale a tu cuerpo alegría macarena
que tu cuerpo es pa' darle alegría y cosa buena.
dale a tu cuerpo alegría macarena.
eh, macarena. aay
Macarena sueña con el corte inglés,
y se compra los modelos más modernos.
le gustaría vivir en Nueva York
y ligar un novio nuevo.
Macarena sueña con el corte inglés,
y se compra los modelos más modernos.
le gustaría vivir en "nueva york"
y ligar un novio nuevo.
Dale a tu cuerpo alegría macarena
que tu cuerpo es pa' darle alegría y cosa buena.
dale a tu cuerpo alegría macarena.
eh, macarena. aah
Pajaritos, a bailar.
Cuando acabas de nacer,
tu colita has de mover.
Para un pajarito ser,
este baile has de bailar
y a todo el mundo alegrar.
El piquito has de mover
y las plumas sacudir,
la colita remover.
Las rodillas doblarás,
dos saltitos tú darás
y volarás.
Es día de fiesta,
baila sin parar,
vamos a volar tú y yo
cruzando el cielo azul
y el ancho mar.
Pajaritos, a bailar,
el más joven saltará,
el mayor se moverá.
No hemos terminado aún,
bailaremos sin parar
hasta la noche acabar.
El piquito has de mover…
Si en el firmamento poder yo tuviera,
esta noche negra lo mismo que un pozo,
con un cuchillito de luna lunera,
cortara los hierros de tu calabozo.
Si yo fuera reina de la luz del día,
del viento y del mar,
cordeles de esclava yo me ceñiría
por tu libertad.
Estribillo
¡Ay, pena, penita, pena -pena-,
ay, pena de mi corazón,
ay, que me corre por las venas -pena-
con la fuerza de un ciclón!
Es lo mismo que un nublado
de tiniebla y pedernal.
Es un potro desbocado
que no sabe dónde va.
Es un desierto de arena -pena-,
es mi gloria en un penal.
¡Ay, penal! ¡Ay, penal!
¡Ay, pena, penita, pena!
Yo no quiero flores, dinero, ni palmas,
quiero que me dejen llorar mis pesares
y estar a tu vera, cariño del alma,
bebiéndome el llanto de tus soleares.
Me duelen los ojos de mirar sin verte,
reniego de mí,
que tienen la culpa de tu mala suerte
mis rosas de abril.
Estribillo